Matthias Giraud ha realizado el primer salto base desde la Aiguille du Goûter del Mont Blanc. La hazaña tiene cifras escalofriantes: el salto base lo ha realizado con esquís, desde más de 4.300 metros de altitud sobre el nivel del mar en un serac de 80 metros de espesor.
El primer hombre que ha saltado desde la Aiguille du Goûter del Mont Blanc en esquí de salto base
Después de cinco años de planificación y demoras debidas a la meteorología y a las restricciones del covid, Matthias Giraud encontró el momento perfecto para lograr esta primicia mundial de salto base con esquís desde el Mont Blanc. A 4.000 metros la atmósfera es compleja de predecir, los vientos son racheados y el estado del serac – una enorme estructura de hielo fragmentado por importantes grietas en un glaciar – es muy variable.
Matthias Giraud, apodado «Super Frenchie», se ha convertido en el primer hombre que ha saltado desde la Aiguille du Goûter en esquí de salto base. Se lanzó desde el Dôme du Goûter a una altitud de 4.304 m, esquiando un serac de 80 m encaramado sobre la cara rocosa de la Aiguille y el Couloir Direct Ouest, y luego saltó al aire a 4.000 m, abriendo su paracaídas y volando entre la Aiguille du Goûter y la Aiguille de Bionnassay. Simplemente espectacular.
Matthias Giraud lleva años soñando con hacer realidad este reto y así especificaba los preparativos y los pasos que ha debido dar antes de afrontar semejante reto: «El viento y el tiempo muy variable de las dos últimas semanas han afectado a la nieve, pero las condiciones más estables han vuelto con las recientes altas presiones atmosféricas»,
El piloto de 35 años aseguraba que «El ligero viento del norte de 10 a 20 km/h en la cúpula era molesto, pero una bolsa de aire en calma debajo del serac me permitió abrir el paracaídas con seguridad. Sin embargo, fue necesario abrir rápidamente el paracaídas debido a que el aire es 30% más fino en altitud, lo que provocó una rápida pérdida de altura en el acantilado. El viento que bajaba desde el norte por la Aiguille du Goûter también empujó mi paracaídas hacia la cresta sur del Couloir Ouest Direct con sólo 20 metros de margen. Volando entre la Aiguille du Goûter y la Aiguille de Bionnassay hacia el glaciar de Bionnassay y también tuve que sortear un fuerte viento anabático . Fue un vuelo turbulento hasta que aterricé debajo del Refugio del Goûter, en el lado norte del glaciar.»
El experto en salto base explicaba así las razones para afrontar semejante reto: «Crecí esquiando en Saint-Gervais frente al Mont Blanc. Lo he admirado toda mi vida e incluso me lo he tatuado en la espalda tras mi salto en 2019. Realizar varios primeros descensos de esquí de salto BASE en el mundo y más concretamente en el macizo del Mont-Blanc convierte en realidad mis sueños de infancia, un enfoque moderno y creativo del alpinismo. Este primer salto BASE en la Aiguille du Goûter es un momento de orgullo para mí. Es la ruta clásica a la cumbre del Mont Blanc y una enorme pared rocosa llena de historia. Un gran agradecimiento a Kevin Gourgues, Alex Perinet y Stefan Laude, que me acompañaron en este proyecto.»
