¿Quién no quisiera sentarse frente a la chimenea en una cabaña, en medio del bosque nevado, con una taza de chocolate caliente tras un duro pero satisfactorio día de esquí?
En invierno, no hay mayor placer que llegar a casa y sentir la calidez del ambiente con una decoración que nos haga creer que estamos en la montaña.
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Cuando pensamos en una cabaña de madera, lo primero que se nos viene a la cabeza son las preciosas y acogedoras casitas en las montañas. Gracias a la calidez de la madera y a la elegancia de la piedra, la decoración rústica es una gran opción para recrear este ambiente en tu hogar vivas donde vivas.
Por eso, desde I love Ski, hoy te traemos muchas ideas para darle un toque acogedor a tu hogar y adoptar una decoración rústica estilo cabaña, ideal para la temporada invernal. Madera, piedra, chimeneas, colores cálidos, accesorios y velas por todas partes es lo que hoy te proponemos, suena bien, ¿no? ¡Allá vamos!
Madera: la aliada perfecta
El material por excelencia del que se construye una cabaña y del que no se puede prescindir en el estilo rústico es, sin duda, la madera. La puedes utilizar en columnas, paredes, techos, puertas, ventanas, vigas, barandillas o muebles. Si tiene imperfecciones o nudos mejor, pues dotará al espacio de una mayor belleza y carácter.
Vigas para crear un ambiente de cabaña perfecto
Las vigas de madera serán uno de tus mejores elementos decorativos. Lograrán crear el ambiente de cabaña y esa atmósfera rural, nórdica y vintage que buscamos.
Chimenea: indispensable
La chimenea es un must en cualquier cabaña que se precie. Si eres de los afortunados que en su salón tiene una chimenea… ¡úsala! Te dará una sensación de confort inigualable, además de ir de perlas con este tipo de decoración.
Tip: si no tienes la suerte de tener una chimenea ni quieres meterte en la locura que supone una obra, te proponemos que enciendas la tele, pongas YouTube, y busques un video con imagen y sonido de un fuego o unas brasas. No te dará calor, ¡pero te aseguramos que conseguirás crear el ambiente que buscas!
Tonos claros para la decoración
Si buscas recrear el ambiente relajado de tu cabaña de la montaña, estos colores tienen que reinar en la decoración. Sobre todo te proponemos que optes por tonos suaves en crema y arena, y tonos de la naturaleza como verdes y ocres.
Así, la mejor combinación sería la de madera para los muebles y tonos claros para los textiles.
Otra idea que funciona genial en este tipo de decoración es jugar con el contraste entre el negro y el color de la madera natural. Esto le dará mucha personalidad y carácter a la estancia, siendo un estilo muy sofisticado y sobrio, pero muy natural al mismo tiempo.
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Una opción más arriesgada pero triunfadora es la de mezclar colores cálidos y fríos. Aunque parezca una locura, esto queda sorprendentemente bien y aporta una sensación de comodidad, calidez y alegría únicos. Si buscas crear contrastes, puedes utilizar colores neutros y claros para la base, y jugar con tonos más vibrantes en los accesorios como un azul petróleo, un verde botella o tonalidades que tiren hacia el color rojo, marrón, teja, etc.,
Juega con las texturas
Mezclar terciopelo, lana, tejidos naturales, lino, papel pintado en las paredes o cualquier otra textura para tapizar tus muebles y almohadas es una gran idea para llenar tu cabaña (o tu casa, en su defecto) de vida y alegría.
Objetos de decoración para vestir tu cabaña
Para terminar de darle el toque nórdico pero cálido y relajado a tu estancia te traemos algunas ideas:
La iluminación es la clave para eliminar la sensación fría. Añade lámparas (de pie o de techo) de luz cálida y velas por todas partes. Además, si añades cortinas, que sean de colores claros (como hemos visto en apartados anteriores) y tejidos finos que permitan que la luz traspase al interior de tu hogar.
Hazte con mobiliario de aspecto vintage o envejecido como mesas de centro o auxiliares, lámparas, sillas, etc. También puedes conseguir muebles de madera sin tratar o pintados y desgastados, hierro oxidado y muebles de jardín viejos, etc.
Añade accesorios metálicos que contrasten con la madera para crear el característico y acogedor encanto que buscamos.
La cerámica y la forja tampoco pueden faltar en tu nueva decoración de estilo rústico. Añádelo en sillas, camas o elementos decorativos.
No hay mejor manera de aportar calidez a tu estancia que añadiendo objetos mullidos, cómodos y gustosos para aportar el toque acogedor final. Lo funcional y lo artístico no tienen porque estar reñidos. Puedes añadir cojines en tonos cálidos que contrasten con el sofá o la cama, una gran alfombra mullida en tonos cálidos como beige, tierra o marrón claro.
Intenta incluir plantas en tu decoración, llenarán la estancia de vida y color, y crearán un precioso contraste con los tonos claros de la madera.
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