El túnel de Aragnouet-Bielsa celebró en 2022 su 46 aniversario. Fue en 2016 cuando este túnel que une España y Francia por tierras aragonesas, alcanzó las cuatro décadas en presencia del Presidente del consistorio francés, Michel Pélieu, junto a su homólogo español Javier Lamban, presidente del gobierno de Aragón.

El denominado túnel de Bielsa, ofrece un acceso por carretera entre el Valle de Aure (Hautes-Pyrénées) y el territorio español de Sobrarbe (Aragon), en el cual se contabilizan una media de 1000 vehículos por día llegando a 4000 en periodos estivales alcanzando prácticamente el mismo volumen de tráfico que el famoso tunel de Somport (1200 vehículos por día).

El túnel de Bielsa: la conexión franco-española

Cada año traspasan de un país al otro por el túnel de Bielsa hasta 350.000 vehículos, experimentando una fuerte progresión en relación a los años anteriores.

Estas cifras son el resultado de una gestión mucho más eficaz que antaño. Quizás uno de los puntos claves , fue la creación del Consorcio Aragnouet-Bielsa en 2008 y los 21 M€ invertidos en trabajos de rehabilitación y en medidas de seguridad. (11 M€ financiados por Europa y 10 M€ financiados a partes iguales por el departamento de Hautes-Pyrénées de Francia y el gobierno de Aragon).

El eterno problema de hace años, era la limpieza de las carreteras durante el período de invierno, dificultando la circulación en ambos sentidos.Entre otros, fue gracias a la predisposición de Michel Pélieu, presidente del Consejo General de Hautes-Pyrénées y del Consorcio del túnel Aragnouet-Bielsa, para poner los medios necesarios para que esta vía de acceso entre países estuviera siempre en buen estado y transitable.

Objetivo del túnel de Bielsa: estar siempre abierto

En relación al mundo de la nieve, este paso es clave para facilitar el acceso de los esquiadores españoles que desean pasar el día o una estancia en una estación de esquí del pirineo francés. Evidentemente, estaciones de esquí de Pirineos franceses como Saint-Lary, Piau EngalyPeyragudes se ven reforzadas por la correcta gestión del túnel y desde entonces el flujo de apasionados de la nieve no cesa. En el Sobrarbe no hay estación de esquí por lo que en invierno, los esquiadores franceses pasan al lado español por otros accesos como, Somport, Vielha, Irún…

El Alcalde de Saint Lary, Jean-Henri Mir indicaba a los compañeros de La Dépêche : « El tunel es un espacio transfronterizo económicamente muy pertinente aportando valor a nuestros valles».

El próximo reto de los políticos y del Consorcio Aragnouet-Bielsa será facilitar que las vías de ambos sentidos del túnel de Bielsa, estén abiertos de forma simultánea, con objeto de aumentar la fluidez del tráfico en la zona y limitar los actuales tiempos de espera.

El túnel de Bielsa, el gran olvidado

Sin embargo, ya estamos en la temporada de invierno 2022-2023 y el túnel de Bielsa sigue siendo una traba para poder acceder a Francia desde España. El acceso por el Sobrarbe al túnel de Bielsa se realiza por la maltrecha carretera A-138, atravesando multitud de pequeños núcleos urbanos desde El Grado hasta Ainsa, para posteriormente subir el puerto dejando atrás Escalona, Lafortunada, Salinas, Bielsa y Parzán. Una acceso complejo que multitud de conductores intenta evitar, pasando por Sabiñánigo, Fiscal, Boltaña y llegar a Ainsa. El acceso también es complejo, pero es más rápido.

Pero la dificultad de llegar a territorio francés por el túnel de Bielsa-Aragnouet no termina ahí. El túnel de Bielsa sigue funcionando con semáforos, alternando la circulación entre ambas partes de la frontera obligando a incómodas esperas que no suceden en otros pasos fronterizos. Además la carretera que desciende hasta Aragnouet, la D-173, es la gran olvidada de los Altos Pirineos franceses. Es un puerto de montaña con multitud de curvas mal peraltadas y guardarrailes inexistentes o en mal estado de conservación que durante el invierno representa una auténtica odisea para los que circulan por ella.

Mientras, los habitantes de ambos lados de la frontera, los transportistas y turistas siguen soñando con la prometida Travesía Central de los Pirineos, un proyecto ferroviario que esperemos se vuelva una realidad con las inversiones millonarias que se están realizando en la zona de Canfranc que facilitaría el paso a miles de vehículos accediendo desde Jaca.